lunes, 28 de febrero de 2011

Melancolía...? Tedio...?

Hay dos tipos de aburrimiento; uno reactivo, que se produce como consecuencia de algo (nos aburre este libro, aquella conversación, tal tema en concreto), y otro existencial; la vida se vacía de contenido, se vuelve soporífera, insípida, sosa, cansina, sin vibración. No hay dimensión futura y todo es presente; pero un presente que se alarga interminablemente, que no acaba de pasar. Se trata de una inundación del hastió, que se parece mucho a la ansiedad y que, si prospera, termina por deslizarse hacia la melancolía.

Se puede describir como una trayectoria que desde la ansiedad desemboca en desesperación.

No hay nada, es decir, todo esta inmerso en una especial ausencia, cargante, insoportable, atroz; todo se vuelve vaporoso y desdibujado y la vida se hace volátil. El hombre se hunde sin remedio en un mundo hueco. Los existencialistas hablaron mucho de esta experiencia.

La gran experiencia que late en el fondo del aburrimiento es el tiempo emocional, ese que cruza en nuestro interior como un termómetro y nos da cuenta del interés que despierta lo que nos pasa. Pues bien, en el aburrimiento el tiempo se va parando hasta detenerse; se observa matemáticamente el discurrir infinitesimal de los minutos. Y esto es terrible. Es tan doloroso, que se parece mucho a la ansiedad, aunque con unos matices diferentes. En el aburrimiento los instantes se eternizan. Lo único que cabe es refugiarse en el sueño: dormir.

Viene después, otra etapa. De la ansiedad se pasa al aburrimiento y este, al persistir, se transforma en melancolía. Entramos en un nuevo paisaje sentimental. La melancolía es siempre pesar interior, cansancio de la vida, decepción, excursión hacia atrás y cierre del futuro.

 La persona se desmorona por dentro y siente que no tiene fuerzas para nada.

Si la ansiedad nos lleva a la nada, la melancolía nos traslada al pasado y nos cierra las puertas del porvenir.



El tramo siguiente lleva de la melancolía a la desesperanza. La esperanza es el puente que tendemos entre el pasado y el futuro, lo que significa que aun se aguardan cosas positivas, 


que hay ilusiones.




Regresiones Bird